Crown Magnetar ha establecido una inclinación constante por el caos técnico y lanza Punishment, su EP mejor construido hasta la fecha.
Por Simon Carrillo
Si todavía estás buscando la brutalidad del deathcore y no te importa que se fusione con una capa de producción moderna, no busques más. Los discípulos bárbaros de Crown Magnetar, originarios de Colorado, han tenido una clara misión durante cuatro años: pintar a los oyentes un mosaico musical empapado de violencia sonora. Para aquellos que añoran los días dorados del deathcore, Crown Magnetar ha entregado Punishment (bajo el sello Unique Leader Records), su quinta entrega, un nuevo balde de sangre para cubrir su lienzo de destrucción y caos. Crown Magnetar son maestros en la combinación de tecnicismo y agresión absoluta, y con Punishment prefieren la embestida a la laceración.
Punishment no podría tener un título más apropiado para esta nueva exhibición de Crown Magnetar. Doce minutos de sonido contundente, condensados en un martilleo férreo que prácticamente no deja espacio para respirar al oyente. El diseño de la carátula, a cargo del artista y diseñador digital Caelan Stokkermans, destaca por sus excelentes obras digitales que parecen pinturas al óleo. El EP comienza con Barbed Wire Noose, una paliza que incluye todos los elementos básicos de Crown Magnetar. El guitarrista Nick Burnett, el bajista Mike Sahm y el baterista Byron London desatan toda su ferocidad rítmica junto con el rango impecablemente infernal del vocalista Dan Tucker. De hecho, esta canción te hará sentir como si te estuvieran apretando violentamente un nudo oxidado alrededor del cuello, con la yugular a punto de desbordarse, especialmente en Nailed the Fuck Down.
Si pensabas que la pista anterior no era lo suficientemente implacable, prepárate. Una musicalidad rápida, que rivaliza con la velocidad de una pistola de clavos de múltiples cámaras, se conceptualiza en una profanación de tres minutos de tus tímpanos. Bringer of Dead Light es la exposición vocal definitiva de Punishment. Es evidente lo malvado que puede sonar Dan Tucker, pero esta canción refuerza esa noción de tal manera que las voces en sí mismas se destacan como el instrumento más pesado de la pista. London, Sahm y Burnett merecen el mismo crédito por la brutalidad y técnica empleadas en este tema. Con solo la última pista por delante, Crown Magnetar nos ha infligido exponencialmente más daño que muchas otras bandas dentro de los confines de un álbum completo.
El tema final, Decapitation Ritual, es simple y literal. Por cuarta y última vez en este festival de tortura sónica, Crown Magnetar deja claro que la extracción de tu cráneo es un proceso inquietantemente lento y empapado de fluidos corporales. Ya sea que el oyente todavía esté coherente o no cuando comience Decapitation Ritual, esta bestia de cierre asegura que no lo estés al final.
Jodidamente despiadado. Crown Magnetar lo está rompiendo todo aquí, entregando cuatro bestias absolutas que muestran la brillantez de esta banda. Suenan más crueles y caóticos que nunca.